El Potro intenta el Galope, pero cae en un “pozo”

En esta líneas intentaremos aportar más información a la que ya hemos entregado previo al partido y tambien una vez finalizado.

Lamentablemente la poca cobertura del partido nos lleva a ver sólo las imágenes de los goles y la falta de Valladares sobre Villanueva, que provocó su expulsión. con la mente más fría y abstrayéndose del entorno del partido, en todas estas jugadas el árbitro Pozo, aplicó bien el reglamento.

Y me moy a detener en el tercer gol de Audax Italiano, cuando el balón va hacia el campo melipillano, previo al cabezazo de Valladares, Fabián Orellana se encuentra adelantado y por eso el asistente Richard Strudel levanta su banderola, pero lo que Strudel no advirtió es que el balón fue enviado a campo contrario producto de un saque de meta. Y como buenos conocedores de fútbol, sabemos que cuando el balón ha salido de la cancha, en el reinicio del juego, o sea en saques de metas, tiros de esquina y saques laterales, no se cobran posiciones de adelanto.

Pero ésto no disculpa la actuación de Pablo Pozo que en su analisis global fue menos que regular sobre todo considerando que se siempre se “equivocó”, para no decir “robo”, perjudicando a Deportes Melipilla.

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Ya vimos como las imágenes en la TV no muestran como Jorge Carrasco bloquea dentro del área con su mano un remate de Iván Sepúlveda. Y Pozo no marcó el penal que correspondía

Tampoco se muestra la actitud “matonesca” con que Nicolás Peric arremete contra Carlos Espinoza, quien no advierte que Villanueva está caído. Independiente del error sin intención de Espinoza. Pozo debió expulsar a Peric y no sólo mostrarle la tarjeta amarilla igual que a Valladares, quien sólo intento defender al “8” melipillano.

De igual modo, tampoco vemos las innumerables infracción de que fue víctima Héctor Pericás, si bien Pozo cobro 20 de ellas, pero dejo pasar muchas otras. Y los agresores estuvieron todo el tiempo dentro de la cancha. Incluso luego de mostrarle tarjeta amarilla a Juan González por falta sobre Alejandro Carrasco, a la jugada siguiente el capitán floridano comete otra fuerte infracción en la persona de Pericás. Y Pozo le “perdonó” la vida.

Otro detalle fue el “manotazo” que el uruguayo Leonardo Medina le propinó a Alexis Jiménez y que poso cobró, tomando la decisión técnica del caso, pero también ameritaba tomar una decisión disciplinaria y en este caso correspondía la amonestación. “El Chalo” sólo miraba extrañado la actitud de Medina y de Pozo. ¡Esa no era forma de saludarlo en el día de su cumpleaños!

Todos estos errores arbitrales se van sumando y al final demuestran que hay una actitud predeterminada, sobre todo si en el entretiempo el árbitro Pozo fue duramente increpado por hinchas melipillanos. Por eso al reinicio del juego se vengó en la cancha, de los furiosos hinchas locales.
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Es de esperar que el CDF en la emisión del compacto de este partido incluya todas aquellas escena que demuestren en forma objetiva la disposición que tuvo Pozo en contra de Los Potros. Pero lamentablemente, el compacto será “editado con pinzas” para proteger a los culpables”.

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A quién le resultó lo planificado fue el ”hipócrita” Director Técnico visitante, quién durante la semana se hizo la víctima y llegó a Melipilla haciéndose el simpático, por cierto ya “había tirado la piedra” y ahora le corespondía “esconder la mano”. En todo caso más de algún dirigente local cayó “redondito” en su juego.

Pero volvamos al espíritu de está crónica, y que no es otra que dar a conocer detalles del ambiente de día del partido.

En declaraciones a los medios, el presidente de Melipilla señalaba que el horario del partido había sido coordinado con Luis Musrri, pero por otras fuentes supimos que el DT nunca estuvo de acuerdo con este horario. Ademas se justificaba diciendo que en otro horario no hubieran llegado los melipillanos. Y finalizaba diciendo que los jugadores debieran estar preparados para jugar a cualquier hora. ¿De qué lado está presidente?

Antes que terminara el partido, algunos dirigentes tales como Andrés González, Francisco González y Jorge Ávila, protagonizaron una estampida desde el “block J”. Muchos nos dijimos que iban a preparar la “carta reclamo” para el comité arbitral. Pero después estaban en la zona de camarines saludando al “mala leche” y “llorón” de Raúl Toro.

Algo que se comentó en el estadio, fue la falta de actitud de los dirigentes para “jugársela” por una apelación a la expulsión de Felipe Miranda, porque una vez finalizado el partido con Puerto Montt, se fueron “a celebrar” en vez de reunir las pruebas para acompañar a Felipe al tribunal. ¡Hago todos los esfuerzos, pero cada vez me cuesta más creer en los dirigentes.!

Una advertencia a los “controles” que no hacen bién su trabajo, porque finalizado el partido la zona de camarines fue invadido por algunos que mostraban credenciales que sólo les dá acceso a la tribuna oficial y otros colados. Aparentemente las credenciales para este día eran ser “rubio y narigón”. Y la guinda de la torta fue cuando Franco Gómez, jugador de Melipilla, quizo hacer pasar a un joven que siempre acompaña a Pericás y el más “simpático” de los controles no lo permitió. ¡Una lata!

Ya fuera de carrera para la Copa Sudamericana, debemos concentrarnos para terminar de la mejor forma esta campeonato, llegando lo más alto posible.

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Esta semana de pausa en la competencia servirá a muchos para hacer varios análisis y ya podríamos tener las respuesta a: ¿cómo resolverá el cuerpo técnico al ser requerido desde otras partes? ¿Los dirigentes apostarán a mantenerse o mejorar para el Clausura? ¿Tendremos refuerzos en el plantel? ¿Algún jugador se irá?. Como dijieron por ahí “será una semana de decisiones”.

Para el próximo partido, Luis Musrri tendrá sentimientos encontrados, porque por el hecho de ser profesional querrá ganarle a Universidad Católica y con ese resultado le entregaría el campeonato en bandeja a Colo Colo.

Para tener una visión de futuro quise poner una foto de las nuevas generaciones.

Un saludo a la fiel hinchada melipillana

Juan Carlos