(foto tomada de MelipillaDeportes.com)Luego del nefasto año 2008, considerando el descenso del Potro Solitario a la Primera B y el poco interés de la comunidad melipillana de acercarse a la institución, ya sea haciéndose cargo de la Corporación como participando de la Sociedad Anónima Deportiva.
En definitiva el año 2008 terminaba con el ánimo por los suelos, porque se hacía presagiar que en el futuro la institución se mantendría a la deriva, lo que me llevó a tomar la decisión de alejarme y dejar que los acontecimientos se dieran de la forma que la inacción de los melipillanos lo permitiera.
Esta situación me llevó a no interesarme en la pretemporada del Potro, considerando entrenamientos, partidos amistosos y la misma Copa Chile.
Además se daba que el campeonato de Primera B comenzaba, pero el cuadro melipillano quedaba libre la primera fecha.
Llegado el día del debut, el domingo pasado en San Felipe, frente al cuadro aconcagüino sólo a pocas horas del partido tomé la decisión de asistir a este cotejo.
De esta forma me daba yo mismo una oportunidad de reencontrarme con mi equipo y con la gente que normalmente forma parte del entorno del Potro.
Comenzado el partido y con el marcador adverso por 0 a 2 antes de los 10 minutos de partido, con un arquero Carlos Torres muy dubitativo y que perfectamente pudo haber sido vencido en al menos 2 ocasiones más. Más la poca seguridad que mostraba el fondo melipillano, hacía pensar que el vendaval albi-rojo pasaría sobre el cuadro visitante.
Sin embargo el técnico Jorrit Smink supo leer el partido y con el ingreso de Cristián Olivares, ex-capitán sanfelipeño, la defensa comenzó a afirmarse y con el adelantamiento de Néstor Contreras poco a poco empezó a controlar las acciones.
Por otro lado el cuadro local comenzaba a perder precisión en su juego y el discretísimo cometido del árbitro Ángelo Hermosilla los sacaba de concentración mientras el elenco melipillano comenzaba a adueñarse del campo de juego.
Llegado el minuto 41, y tras haber dejado sin sanción 2 penales a favor de la visita, el colegiado cobra un “penalcito” por falta sobre Contreras, y es Alexis “chalo” Jiménez quien se encargó de convertir el descuento.
Terminado el primer tiempo la hinchada local mostraba su malestar al trío arbitral, incluso algunos jugadores se entreveraron en disputas, que por suerte no pasaron de las ofensas orales.
Al reanudar el juego, antes del minuto de juego, el mediocampista local Francisco Piña comete una falta descalificadora sobre Luis Jiménez y es expulsado del campo de juego.
Con un jugador más el cuadro metropolitano se adueñó del balón y tuvo en jaque en varias oportunidades al meta Lucas Giovini, los ingresos de Eduardo Atabales y Pedro Pinto, renovaron piernas y trajeron nuevas ideas ofensivas. Y es así que llegado el minuto 71 un remate es despejado a medias por la defensa albi-roja y el rebote es tomado por Marcos Plaza, quien a pesar de la oposición del portero Giovini, y marca la igualdad en el marcador.
Al minuto siguiente, panorama se torna todavía más auspicioso para el Potro, ya que el defensa Sergio Fernández recibe una segunda amonestación y por consiguiente la cartulina roja y deja a los locales con sólo 9 hombres.
La desazón local se hace sentir cuando desde la tribuna popular el asistente Juan Donaire es agredido con un proyectil, estando el juego suspendido durante 3 minutos, luego de los llamados por parlante para calmar los ánimos y del reforzamiento de la custodia policial del sector, se reanudaba el juego para los últimos 10 minutos de partido.
Los últimos minutos tuvieron a Deportes Melipilla volcado sobre el arco sur, hasta que el técnico local, Roberto Mariani, realizó sus últimos cambios para reforzar su defensa y no perder el punto que estaba rescatando.
Tras jugarse 5 minutos adicionales el árbitro Hermosilla dio por terminado el partido, pero recién tras 10 minutos de espera logro salir del campo de juego.
En el análisis final, creo que el Potro Solitario, o Mecánico como pretender renombrarlo algunos, logró traerse un punto que al inicio del partido no veía por donde. Sin embargo los minutos finales volcado en franco ataque pudiera dar la impresión de haber perdido 2 puntos.
Lo importante fue ver cómo después del letargo inicial y de los errores de la alineación original, el cuadro pudo rehacerse y sacar adelante el partido.
Lamentablemente los acontecimientos de esta semana, nuevamente muestran sueldos impagos, amenazas de por presentarse a jugar, Etc. Aparentemente las promesas de fines del año pasado, se quedan en sólo intenciones, porque a pesar de que la planilla bajo a cerca de 15 millones, los “cerebros dirigenciales” todavía no logran hacer la gestión que la comunidad melipillana se merece, o quizás es esto lo que se merece.
El próximo sábado 21 de febrero, será el estreno oficial de local frente a Deportes Concepción, y es de esperar que la hinchada acompañe al equipo y que durante los día que restan los “problemas de caja” hayan sido solucionados
Un Saludo para todos
En definitiva el año 2008 terminaba con el ánimo por los suelos, porque se hacía presagiar que en el futuro la institución se mantendría a la deriva, lo que me llevó a tomar la decisión de alejarme y dejar que los acontecimientos se dieran de la forma que la inacción de los melipillanos lo permitiera.
Esta situación me llevó a no interesarme en la pretemporada del Potro, considerando entrenamientos, partidos amistosos y la misma Copa Chile.
Además se daba que el campeonato de Primera B comenzaba, pero el cuadro melipillano quedaba libre la primera fecha.
Llegado el día del debut, el domingo pasado en San Felipe, frente al cuadro aconcagüino sólo a pocas horas del partido tomé la decisión de asistir a este cotejo.
De esta forma me daba yo mismo una oportunidad de reencontrarme con mi equipo y con la gente que normalmente forma parte del entorno del Potro.
Comenzado el partido y con el marcador adverso por 0 a 2 antes de los 10 minutos de partido, con un arquero Carlos Torres muy dubitativo y que perfectamente pudo haber sido vencido en al menos 2 ocasiones más. Más la poca seguridad que mostraba el fondo melipillano, hacía pensar que el vendaval albi-rojo pasaría sobre el cuadro visitante.
Sin embargo el técnico Jorrit Smink supo leer el partido y con el ingreso de Cristián Olivares, ex-capitán sanfelipeño, la defensa comenzó a afirmarse y con el adelantamiento de Néstor Contreras poco a poco empezó a controlar las acciones.
Por otro lado el cuadro local comenzaba a perder precisión en su juego y el discretísimo cometido del árbitro Ángelo Hermosilla los sacaba de concentración mientras el elenco melipillano comenzaba a adueñarse del campo de juego.
Llegado el minuto 41, y tras haber dejado sin sanción 2 penales a favor de la visita, el colegiado cobra un “penalcito” por falta sobre Contreras, y es Alexis “chalo” Jiménez quien se encargó de convertir el descuento.
Terminado el primer tiempo la hinchada local mostraba su malestar al trío arbitral, incluso algunos jugadores se entreveraron en disputas, que por suerte no pasaron de las ofensas orales.
Al reanudar el juego, antes del minuto de juego, el mediocampista local Francisco Piña comete una falta descalificadora sobre Luis Jiménez y es expulsado del campo de juego.
Con un jugador más el cuadro metropolitano se adueñó del balón y tuvo en jaque en varias oportunidades al meta Lucas Giovini, los ingresos de Eduardo Atabales y Pedro Pinto, renovaron piernas y trajeron nuevas ideas ofensivas. Y es así que llegado el minuto 71 un remate es despejado a medias por la defensa albi-roja y el rebote es tomado por Marcos Plaza, quien a pesar de la oposición del portero Giovini, y marca la igualdad en el marcador.
Al minuto siguiente, panorama se torna todavía más auspicioso para el Potro, ya que el defensa Sergio Fernández recibe una segunda amonestación y por consiguiente la cartulina roja y deja a los locales con sólo 9 hombres.
La desazón local se hace sentir cuando desde la tribuna popular el asistente Juan Donaire es agredido con un proyectil, estando el juego suspendido durante 3 minutos, luego de los llamados por parlante para calmar los ánimos y del reforzamiento de la custodia policial del sector, se reanudaba el juego para los últimos 10 minutos de partido.
Los últimos minutos tuvieron a Deportes Melipilla volcado sobre el arco sur, hasta que el técnico local, Roberto Mariani, realizó sus últimos cambios para reforzar su defensa y no perder el punto que estaba rescatando.
Tras jugarse 5 minutos adicionales el árbitro Hermosilla dio por terminado el partido, pero recién tras 10 minutos de espera logro salir del campo de juego.
En el análisis final, creo que el Potro Solitario, o Mecánico como pretender renombrarlo algunos, logró traerse un punto que al inicio del partido no veía por donde. Sin embargo los minutos finales volcado en franco ataque pudiera dar la impresión de haber perdido 2 puntos.
Lo importante fue ver cómo después del letargo inicial y de los errores de la alineación original, el cuadro pudo rehacerse y sacar adelante el partido.
Lamentablemente los acontecimientos de esta semana, nuevamente muestran sueldos impagos, amenazas de por presentarse a jugar, Etc. Aparentemente las promesas de fines del año pasado, se quedan en sólo intenciones, porque a pesar de que la planilla bajo a cerca de 15 millones, los “cerebros dirigenciales” todavía no logran hacer la gestión que la comunidad melipillana se merece, o quizás es esto lo que se merece.
El próximo sábado 21 de febrero, será el estreno oficial de local frente a Deportes Concepción, y es de esperar que la hinchada acompañe al equipo y que durante los día que restan los “problemas de caja” hayan sido solucionados
Un Saludo para todos
